CONSIDERACIONES ESPECIALES EN
PROGRAMAS DE PRODUCCIÓN AGRÍCOLA
Pedro
Raúl Solórzano Peraza
Enero
de 2017
V.-CASO
DEL GIRASOL (Helianthus annuus).
El girasol es un cultivo muy interesante debido a
que su semilla acumula un alto porcentaje de aceite comestible de excelente
calidad, y el subproducto, después de la extracción del aceite, es una torta de
gran utilidad en la elaboración de alimentos balanceados para animales. Siendo
una semilla oleaginosa, su producción en el país vendría a contribuir en la
disminución de la dependencia que tenemos de mercados externos, desde donde
importamos grandes volúmenes de aceites y grasas comestibles visibles cada año.
En el país su producción ha sido cíclica durante
los últimos 25 años, estando en la actualidad prácticamente en cero,
especialmente este año cuando no se dispuso a tiempo de suficiente semilla
certificada para enfrentar los programas planteados, en particular, en la
región de los Llanos Occidentales, cuyos productores se quedaron con la tierra
preparada.
Se ha promocionado por ser un cultivo de buenas
perspectivas en regiones de errática precipitación, tales como algunos sectores
de los Llanos Centrales, y en las sabanas orientales con suelos de baja
capacidad de retención de humedad. Igualmente, se ha promocionado como segundo
cultivo (salidas de aguas) en los Llanos Occidentales, todo lo cual se debe a
que es una planta con un sistema radical profundo, capaz de aprovechar agua y
nutrientes que escaparían a otras plantas cultivadas que tienen raíces más
superficiales.
El girasol se ha estado evaluando en diversas regiones desde principios de los años setenta por parte de dos especialistas del FONAIAP, Voinea y Mazzani. Las evaluaciones comenzaron por el estado Guárico con unas variedades de origen rumano al igual que Voinea, que sembraron de amarillo las agrestes tierras en la ruta Chaguaramas-Las Mercedes del Llano. Aquello era una novedad en una región donde solo se conocía el blanco del algodonero que sembraban algunos productores con el concurso y apoyo de las empresas textileras, y para ese entonces, el alegre tono rojizo de las panículas de sorgo granífero que comenzaba a despuntar como un cultivo ideal para esa región ganadera del país.
Posteriormente
se introdujeron materiales de USA y cuando las evaluaciones se extienden a los
Llanos Occidentales también se trabaja con cultivares de origen argentino y de otros lugares. Luego
de varios años, en la medida que se fueron obteniendo resultados favorables, el
girasol se convirtió en una opción cierta y se comenzaron siembras comerciales
que en un momento superaron las 100.000 ha anuales.
Especialmente
el estado Portuguesa se convirtió en el principal productor de este grano
oleaginoso, en parte porque las condiciones de sus ciclos Norte-Verano son
muy favorables por existir humedad edáfica suficiente cuando la planta de girasol la
requiere en sus etapas de rápido crecimiento, un ambiente poco propicio para enfermedades foliares y la presencia de una etapa seca para
el momento de la maduración del grano y la recolección, lo cual es muy
conveniente. Quizás esta región del país sea la mejor para este cultivo, aunque
no hay que descuidar otras donde se pueda cultivar girasol con bastante éxito.
En esos ciclos denominados Norte-Verano, el girasol se siembra como segundo cultivo o cultivo
complementario. Esto significa que después del cultivo principal que ocupa el
primer pico de las lluvias, el cual puede ser maíz o arroz, se viene la siembra
de girasol. En estas condiciones, este
segundo cultivo puede aprovechar el efecto residual de los fertilizantes
fosfáticos y potásicos aplicados al cultivo principal, disminuyendo los costos de producción por concepto de
fertilizantes. Esta actividad permite utilizar los suelos durante todo el año,
lo cual debe ser compensado con algunas prácticas especiales para evitar el
deterioro de este especial recurso natural.
Basados
sobre todo ese conocimiento que se tiene del cultivo, y la necesidad de
producir fuentes de aceites comestibles en el país, es perentorio, apremiante,
promover la siembra comercial de girasol en aquellos sistemas suelo-clima donde
se tienen experiencias favorables, pero al mismo tiempo mantener una evaluación permanente de los
cultivares que pudieran tener buen comportamiento en esos sistemas y de todas aquellas prácticas agronómicas que puedan mejorar la productividad del cultivo. Paralelamente, organizar
un flujo suficiente y oportuno de los insumos requeridos para que las siembras
puedan llegar a un final satisfactorio, con buenos rendimientos y productos de elevada calidad.
Pedro
Raúl Solórzano Peraza
Enero
de 2017
pedroraulsolorzanoperaza.blogspot.com
Recientemente compré aceite de girasol en Sabana Grande. La marca es ucraniana y me recordé del accidente de la planta nuclear de Chernobyl y si habían habido restricciones por los productos agrícolas de ese país, en particular, del girasol. Busqué por Internet y no hallé nada. Tendrás informaciones recientes al respecto? Será seguro consumir ese aceite ucraniano?
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